DOMINGO 5º DE CUARESMA
CICLO B
En el deseo de conocer a Jesús adquiere una importancia
decisiva la figura del mediador, del instrumento, de quien facilita el camino y hace posible el
encuentro. En ocasiones necesitamos
recurrir que alguien nos facilite las cosas. Esto hicieron algunos
gentiles. Acudieron a Felipe y a Andrés para que le presentaran a Jesús. Y los dos apóstoles no les
defraudaron, les llevaron ante el Maestro, a Jesús. Por medio de ellos pudieron conocerlo. Que importante es el papel de quien nos pone en contacto con alguien, de
quien nos conduce al lugar adecuado, de quien nos acerca a los que buscamos. En a figura de Andrés y
Felipe hoy se nos ofrece a actitud, un valor
a vivir y una dimensión de servicio y ayuda. Debemos tomar conciencia de
ser mediadores ya que, a través de
nuestra vida, de nuestros actos y palabras,
de nuestras personas estamos llamados, a acercar a los hombres a Dios. Pregúntate hoy ¿quiénes te llevan o
te han llevado a Jesús? ¿soy capaz de
llevar a Jesús a las personas que le
buscan?.
Supongo que entraron en diálogo con Jesús, los gentiles, le
preguntarían quién era, y que Jesús les
descubriera su corazón. Y al hablarle de Él, les muestra un nuevo proyecto de vida, les propone un nuevo estilo de vivir
donde la entrega, la donación a los demás
adquiere el valor supremo.
Estamos en la última
semana de Cuaresma. Ya no podemos
esperar más el tiempo de conocer a
Jesús, de estar a su lado, de dialogar con él de ser mediador entre Dios y los hombres.. No dilates para más
adelante esta ocasión de vivir de manera
fuerte y comprometida la Semana Santa. Es necesario que me entregue y me sacrifique por los demás. Me urge que viva el encuentro con
Jesús en esta Pascua y no la demore más.
En este domingo celebramos el día del Seminario, recemos de
un modo muy especial por los seminaristas que se preparan para ser sacerdotes
de Cristo. Que su vida pueda ser toda ella una custodia y una
búsqueda del bien de los hermanos y una entrega a todos ellos.
Que los sacerdotes sirvan a Dios como instrumentos que reflejan el amor
misericordioso y las entrañas de un
Padre que busca que sus hijos se
encuentren siempre reguardados y protegidos.
Que el Señor, premie con amor la entrega generosa de los sacerdotes de nuestra Parroquia.
Antonio
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