Ascensión de Cristo

Ascensión de Cristo (hacia 1495)
Perugio (1448-1523)
Museo Bellas Artes de Lyon

En origen esta pintura estaba en la basílica de San Pedro, en Perugia. A finales del S XVI , debido a un incendio el retablo se desmontó y por ello las piezas se dispersaron.

En la composición vemos centralmente la figura de Cristo que asciende solo, alejándose de la representación medieval en la que era común que fuera transportado por los ángeles. Cristo con la túnica roja, símbolo de la Pasión.

Vemos pues a Cristo, rodeado por ángeles que tocan instrumentos y rodeados por serafines que forman una aureola almendrada que nos recuerda modelos bizantinos.

También vemos dos ángeles que portan filacterias y que miran a los apóstoles con sus inscripciones: Hombres de Galilea, ¿qué hacéis mirando al cielo ¿ Este mismo Jesús, que ha sido elevado al cielo vendrá de igual manera que le habéis visto subir al cielo. Hch 1, 11.

En el torso de Cristo se nota el conocimiento anatómico del cuerpo humano que el pintor aprendió con Verrochio en su taller, al modo grecolatino y básico en el Renacimiento.

La fuerza de Cristo en sentido ascendente nos lleva al Padre enmarcado en un círculo y portando la bola del mundo. Abajo, Cristo dirige la mirada hacia su Madre, y así tenemos un eje longitudinal de arriba hacia abajo. Junto a Ella, los apóstoles en grupos nos recuerdan también el relato de Hch 1, 9-10 : Mientras ellos lo observaban, se elevó y una nube lo ocultó a sus ojos. Estaban mirando atentamente el cielo mientras él se iba.

En un primer plano, a izquierda, de espaldas al espectador tenemos un apóstol que nos invita a mirar la composición. También a la derecha tenemos otro, pero este de lado; y a todos los vemos nimbados pero muy tenuemente, alejándose de la tradición medieval.

Al lado de la Virgen vemos a San Pedro, sorprendido y mirando al cielo, y a San Pablo mucho más ausente y no mirando a Cristo. Esto último es un anacronismo, pues en el momento de la Ascensión , San Pablo no formaba parte de los apóstoles, quizá por eso no mire directamente. Pero desde el principio de las representaciones  en muchas los dos personajes ya figuran; uno como apostol de los judíos y otro como apóstol de los gentiles, además de estar identificados por los símbolos de las llaves y la espada respectivamente.

El tratamiento de las vestimentas de los personajes tiene un gran colorido y volumen, y por último ver el paisaje que se vislumbra detrás de los apóstoles pues permite acentuar el sentido de profundidad y perspectiva.

Manuel