Bautismo y Espíritu Santo


Pila bautismal
Románico Palentino

El sábado pasado siguiendo la narración de los Hechos de los Apostoles (Hc 19), tenemos un pasaje donde se nos habla del bautismo: "Pablo les preguntó de nuevo "Entonces ¿ qué bautismo recibisteis ? , Ellos respondieron "el bautismo de Juan", Y Pablo dijo: "Juan dio un bautismo para el arrepentimiento, pero invitaba al pueblo a que creyera en el que vendría después de él; Jesus".



Al oir esto todos fueron bautizados en el Señor Jesús. Luego puso las manos y vino sobre ellos el Espíritu Santo; se pusieron a hablar en lenguas y a profetizar. Eran doce hombres."

En este pasaje queda unido el bautismo y el Espíritu Santo.
En la imagen de la pila bautismal que adjuntamos, precisamente aparece un bautismo, los personajes aparecen alrededor de ella, los padres, padrinos y demás personajes les acompañan.


Las pilas bautismales, tal y como las conocemos hoy, están ligadas al Bautismo por inmersión, que perdura desde tiempos paleocristianos hasta el siglo XV en que empieza a imponerse el actual sistema.


A lo largo de esta larga época, la tradición fue evolucionando desde la construcción de de edificios separados de la iglesia llamados baptisterios que albergaban piscinas o grandes cubas a la inclusión del lugar del bautismo dentro de la propia iglesia, mediante pilas más pequeñas. Originalmente, éstas pudieron ser de madera o incluso metal para ser reemplazadas posteriormente por otras de piedra.


En el periodo románico estaba ya popularizada la pila bautismal, siendo su incorporación al templo una de las acciones más importantes tras la edificación de la iglesia. Ésta solía estar ubicada junto a la puerta, en el atrio, o bien en el interior junto a los muros laterales, sobre todo el del Evangelio.

Manuel

Comentarios